Tras varios conflictos legales con las autoridades de su ciudad, la iglesia del pastor John MacArthur será recompensada monetariamente tras llegar a un importante acuerdo.

El estado de California y la ciudad de Los Ángeles se comprometieron a pagar 800,000 dólares en honorarios legales a la iglesia de John MacArthur, con el fin de acabar y resolver su demanda contra ésta sobre las reglas de cierre de coronavirus.

Grace Community Church, dirigida por el pastor MacArthur, estuvo involucrada varios meses en batallas legales contra funcionarios de su ciudad por negarse a cumplir con las medidas de cierre para la prevención del covid-19.

Recientemente, la abogada Jenna Ellis de Thomas More Society, y quien también ayudó a representar a la congregación, informó en su cuenta de Twitter sobre el logro obtenido y la bonificación de 800,000 dólares.

«Estamos muy contentos de ver las protecciones de la Primera Enmienda del Pastor MacArthur y Grace Community Church plenamente reivindicadas en este caso», se lee en su comunicado.

«Ha sido una batalla muy reñida para preservar la libertad religiosa y esperamos que este resultado anime a los californianos, y a todos los estadounidenses, a seguir manteniéndose firmes en que la iglesia es esencial».

La Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles aceptó el acuerdo, basando su decisión en los recientes fallos de la Corte Suprema del país.

La SCOTUS (Corte Suprema de los Estados Unidos), promulgó algunas directrices a favor de los lugares de culto, anulando las medidas de salud que las autoridades impongan sobre estas.

En base con estos anuncios de parte del principal organismo legal de la nación, la Junta de Supervisores decidió no continuar con sus demandas contra la iglesia en vista de qué ahora tienen las de ganar. El abogado del condado señaló que este último movimiento era lo más responsable y apropiado que pudieron hacer.

Desde agosto del año pasado, el pastor MacArthur y su iglesia demandaron a California por prohibirles celebrar cultos en el interior de su templo.

El gobierno estatal decretó medidas para la prevención de contagios en medio de la pandemia, y aunque en primera instancia acataron las órdenes, regresaron al establecimiento para seguir realizando sus servicios en persona.

MacArthur comentó que a pesar de que había pasado sus cultos al formato online, las personas volvieron por sí mismas al templo, dándose cuenta de la necesidad e importancia de mantenerse abiertos en medio del covid-19.

A pesar de que fue amenazado con ser encarcelado por desobediencia, el predicador se mantuvo firme en su decisión hasta el final, logrando alcanzar esta reciente victoria, la cual está siendo celebrada por muchos.